El sistema de refinación que recibió el gobierno de López Obrador estaba muy distante de ser óptimo, por ello tener un México autosustentable en el suministro de combustibles resulta un enorme reto. Un excelente argumento para la búsqueda de la autonomía energética fue la helada invernal de Texas. Suponiendo que se lograran rehabilitar las refinerías y se sume a Dos Bocas, la producción calculada (operando al 85%) representaría el 78% de la demanda de gasolinas y diésel. Pero hasta ahora se opera en 40% ¿Será oportuno invertir los escasos recursos del país para cubrir la gigantesca deuda que tiene la petrolera, y que continua creciendo a ritmo acelerado?
Onexpo Pág. 024-027. Columna Mario Guido