Jaque Mate (Precio administrado)

Tras manifestar su rechazo al subsidio a la gasolina, el autor de la columna señala que es inaceptable usar dinero público para reducir artificialmente el precio de un producto que, aunque afecta a todos, es usado principalmente por el 30 por ciento más rico de la población, incluyendo los precios administrados. El problema es que una parte importante del precio de la gasolina se compone de impuestos. Para 2017 se había previsto que el IEPS sería de 4.60 pesos por litro. La cantidad bajó a 3.20 para moderar el gasolinazo, pero aun así el IEPS, sumado al 16% de IVA, lleva la carga fiscal de un litro de Magna a 33%. En Estados Unidos la cifra es de alrededor de 21%, lo cual explica por qué la gasolina es más cara en México que en Estados Unidos.

Fuente: Reforma  Pág. 12. Columna de Sergio Sarmiento

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