Mario Maldonado comenta que en el sector energético las cosas están más que claras: el gobierno de Andrés Manuel López Obrador está abierto a la libre competencia, siempre y cuando sus empresas productivas del Estado, llámense Petróleos Mexicanos o Comisión Federal de Electricidad, se mantengan en posiciones de privilegio frente a sus rivales comerciales. El caso de Pemex es el más representativo de esta premisa. En una especie de doble discurso, la empresa arrancó hace unos días una campaña publicitaria para posicionar sus combustibles frente a la competencia. Junto con ello eliminó los candados que le impedían vender su producto a precios anticompetitivos e incluso por debajo de los costos de producción. Y en la CFE, ahí viene también.
El Universal Pág. 30. Columna Mario Maldonado