Un año atrás por testas fechas, se veían larguísimas filas de iracundos consumidores en busca de gasolina y otros carburantes, luego de que el presidente AMLO pusiera en marcha su plan antihuachicol. A un año, el director general de Pemex informa que de aquel entonces a la fecha, en robo de combustibles «se logró una reducción de 91%; hubo un ahorro de $56,000 millones en poliductos, en los ductos que transportan el combustible y $1,900 millones en gas licuado».
La Jornada Pág. 020. Columna Carlos Fernández-Vega